La Esquina del Blues y otras músicas:
Con nueve músicos en escena continúa la gira mundial “Building An Ark”, iniciada en Estados Unidos a mediados de octubre en Reno, Nebraska, por el grupo Groundation, y que concluirá en Santa Ana, California a mediados de este mes.
A su paso por la Ciudad de México, el balance que arroja su actuación del pasado sábado 3 de noviembre en El Plaza, resulta sumamente satisfactorio. Por primera ocasión esta banda, considerada como una de las agrupaciones líderes del movimiento contemporáneo del reggae en América, se presentó en México para beneplácito de los amantes de este género, que después de muchos años de esperarlos, tuvieron oportunidad de apreciar en todo su esplendor el trabajo de cada uno de los virtuosos músicos que participan.
Groundation destaca por la fusión de distintos géneros. Durante el espectáculo del sábado claramente se distinguieron muchos elementos jazzísticos, del funk, soul y rhythm and blues sustentados siempre, por una base de reggae roots y someras pinceladas de dub.
En esta ocasión, Groundation, nombre derivado de una especie de ritual rastafari que pone énfasis en los poderes de la música, dio a conocer temas del más reciente disco “Building An Ark”, (Construyendo un arca), que promueve durante su gira y desde luego, mostraron también algunos éxitos de su repertorio (tiene siete discos compactos previos: Young Tree, de 1999; Each one teach one, 2001; Hebron Gate, 2002; We free againg, 2004; Dub Wars, 2006; Upon the bridge, 2006; Here I am, 2009),
La alineación instrumental está conformada por la guitarra de su líder Harrison “Professor” Stafford, quien también lleva la voz cantante y que en ningún momento abusó de los pedales ni la riqueza de sus efectos; Marcus Urani un tecladista y organista impresionante en el manejo de sus instrumentos y en el bajo, de extrema precisión, Ryan Newman. Estos tres integrantes crearon en 1998 el proyecto Groundation.
Más tarde se incorporaron al grupo Ben Krames en las percusiones, conga y timbales, quien este sábado trabajó en complicidad con la batería de Raul Spina. En la sección de metales se encuentran el trombón de Kelsey Howard y la trompeta de David Chachere, y finalmente dos mujeres en las voces, Ken Pommell y Kerry Ann Morgan, que sedujeron al público mexicano con su timbre, el movimiento de sus cuerpos y la prosa y el discurso de sus letras, que hablan de la injusticia y la desigualdad social y a la par, ofrecen mensajes de amor, armonía, paz y esperanza para construir un arca en la que la humanidad pueda alcanzar un mundo mejor.