Noticias

Se descubre cómo atacan los tumores mamarios al sistema nervioso

Dicho hallazgo fue hecho por el biólogo catalán Joan Massagué, el cual podría llegar a revolucionar la terapia contra las enfermedades oncológicas.

“El éxito no está asegurado”, reconoció prudente. “Habrá que diseñar un fármaco, probarlo, demostrar su eficacia, que sus efectos secundarios son tolerables y ver la reacción que provoca el tratamiento si se prueba en enfermos”.

El especialista recibió lleva más de diez años intentando descubrir los secretos de la metástasis.

Entre los últimos estudios publicados está el de la revista Cell, en donde explica el mecanismo por medio del cual las células cancerígenas se desprenden de los tejidos tumorales y se fijan en el cerebro.

Massagué describe, “Estás células se separan del tumor original para entrar en el torrente sanguíneo y, finalmente, cruzan la barrera de sangre del cerebro hasta lograr asentarse en los lugares donde podrán desarrollarse. Conseguirlo no es tarea fácil.”

Cuando las células llegan al órgano se encuentran con las células ‘astrocitos’, que actúan como un escudo de defensa y las fuerzan a autodestruirse. Sin embargo, las defensas fallan. “El cáncer no es más que un acumulo de células erróneas que han extraviado su forma de comportamiento”, describe el científico.

¿Cómo lo descubrió?

Su descubrimiento fue gracias a la plasmina y L1CAM. En medio de esta batalla hay una proteína, llamada plasmina, que actúa en beneficio. Ésta, es una enzima conocida por su efecto anticoagulante de la sangre, que desarrolla una doble estrategia que consistente en impedir que se peguen a la pared externa de las venas y provocar al mismo tiempo que se suiciden.

Lo dañino es L1CAM, un grupo rebelde de células tumorales que crean un escudo natural que le permite anidar en el cerebro y multiplicarse. Una vez que lo logran, todo ha comenzado. Las células supervivientes se enganchan a los capilares sanguíneos y el cáncer se complica.

Este descubrimiento podría favorecer al desarrollo de fármacos que evitarían la metástasis de cáncer de mama y de pulmón en el cerebro, así como otras formas tumorales.

Artículos relacionados

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Back to top button