LaSalud.mx.- Muriel Martino Arriola, es una mujer sobreviviente de cáncer de mama con una historia que inspira fuerza y a seguir adelante, porque su vida no acabó ahí…
Nos concedió una entrevista para LaSalud.mx y compartió esta experiencia que transformó su vida totalmente.
¿A qué edad te detectaron el cáncer de mama?
Hace siete años, cuando tenía 33, me encontraba en un tratamiento para embarazarme, pero desgraciadamente no culminó, después de perder a mi bebé el ginecólogo detecto un tumor en mi seno izquierdo.
Atravesabas por un momento difícil.
Si, también estaba separada del que era mi esposo en ese momento, le pedí tiempo para hacer el trámite del divorcio porque yo no me encontraba en condiciones de realizar ese proceso pero él no me quiso esperar. A pesar de eso, “yo decidí luchar por mí y no por algo que ya no tenía solución e inicie mi tratamiento”.
¿A que tratamiento te sometiste?
Me realizaron una cuadrantectomía, que consiste en extirpar un cuadrante completo de la mama, sólo me extirparon el tumor. Después me volvieron a operar porque había hecho metástasis en los ganglios y me los extirparon. Tome quimioterapia y radioterapias por un año. Me sometí a un tratamiento complementario de hormonoterapia que duro seis años.
Gracias a Dios, contaba con un seguro de gastos médicos mayores que me permitió pagar mi tratamiento en hospitales privados.
¿Cómo decides reiniciar tu vida?
Fue una etapa difícil de superar, es difícil reiniciar tu vida, volverte a restablecer hacia dónde quieres ir o qué quieres hacer, “te bajas del torbellino en el que estas viviendo y esta todo revuelto”. No es fácil volver a iniciar, pero yo decidí seguir adelante, aún conservaba mi trabajo y me mude a vivir con mis papás, por la enfermedad.
Después de cuatro años me volví a independizar y con el tiempo conocí al que ahora es mi esposo. Tienes que hacerte a la idea de que por alguna razón pasan las cosas, pero siempre es importante contar con un apoyo, con la familia, con una terapia o algún grupo, que te ayude a digerir todo lo que estas viviendo y “a darle a la vida para adelante, no quedarte estacionada en la etapa de victima”, recalcó Muriel.
¿Cómo conociste a la Asociación Toca compartir es vivir?
Mi oncólogo fue quien me hablo de Consuelo Austin y de su labor, estaba yo terminando mi primer tratamiento cuando la conocí, hace cinco años. Desde ese momento, me integre a “Toca compartir es vivir” como voluntaria, a veces doy platicas de motivación, comparto con las compañeras mi experiencia, apoyo a Consuelo con la venta de los productos para recaudar fondos.
Es una Asociación muy bonita, que sólo ayuda a mujeres con cáncer de mama, a mi me ayudo mucho a retomar mi vida, a tomar decisiones.
Actualmente estas embarazada, después de haber vivido este difícil proceso, ¡muchas felicidades!
Si -lo dice con emoción-, encontré una nueva pareja que es mejor de lo que yo había pedido, llego a mi vida cuando yo estaba terminando el tratamiento, después de 5 años y mi oncólogo fue el que más me animo para embarazarme. Nos realizaron estudios, a mi esposo y a mi, y resulto que no había impedimento para tener un bebé, así es que decidimos intentarlo. Fue por inseminación in vitro y con la primera implantación quede embarazada, estoy esperando gemelos, son niños y se van a llamar Luciano y Mariano.
“Al final del día te das cuenta de que el cuerpo es muy sabio y del mismo modo en que se recupera el alma, el corazón, también lo hace él”, finalizó Muriel.
