Mundodehoy.com.- Las máquinas expendedoras de libros no son ya ninguna novedad a estas alturas. Existe incluso una máquina expendedora de libros al azar, llamada Biblio-Mat en la ciudad de Toronto, Canadá. Pero todavía se le puede dar una nueva vuelta de tuerca al tema. La editorial Short Edition, especializada en textos que se pueden leer en menos de 20 minutos, o como ellos mismos se denominan, de “literatura popular de calidad para ocupar esos pequeños momentos improductivos”, ha instalado ocho máquinas expendedoras de relatos cortos en la ciudad francesa de Grenoble, al sureste del país.
La máquina, denominada Distribuidor de historias cortas ‒Distributeur d’histoires courtes‒, cuenta con tres botones que permiten elegir el tiempo que se tiene disponible, en periodos que oscilan entre uno, tres y cinco minutos. El texto resultante, por lo demás, es elegido de forma completamente aleatoria, sin tener en cuenta las preferencias del usuario. Como puede verse, el concepto es muy similar al de Pop Fiction, la aplicación que te permite leer historias cortas en esos momentos en los que estás en el baño, pero en el caso de la máquina expendedora el texto saldrá en formato físico, en una especie de ticket. El objetivo es intentar acabar con esa imagen, cada vez más frecuente, de personas que matan el tiempo con sus móviles.
Esta idea se suma a toda una serie de originales iniciativas para fomentar la lectura en lugares públicos en esos momentos en los que nos vemos forzosamente obligados a esperar. En 2012 en una estación de metro de Bucarest se empapelaron las paredes con bibliotecas digitales que los usuarios podían descargarse en sus móviles; y este mismo año la editorial brasileña L&PM regalaba en el metro de Sao Paulo libros que funcionaban también como boletos de metro.
Fuente lapiedradesisifo.com
