Por fin llego a nuestro mercado la nueva generación del Beetle un nombre y concepto que tomo la estafeta del casi mítico y omnipresente “vocho”, aunque perdió la connotación de ‘Auto del Pueblo’, para convertirse en un vehículo de un segmento superior pero que logró un público cautivo muy importante.
Ahora, luego de diversas presentaciones mundiales el Beetle llega a México, y cabe destacar que se fabrica en la Planta de Puebla e inició su producción hace pocos días para su exportación a Estados Unidos, Europa y Asia.
El interior del auto es cómodo para cuatro personas, pero en las plazas traseras la caída del techo que reduce el espacio para la cabeza. Todas las versiones cuentan con quemacocos el cual bien podría haber tenido un mejor diseño ya que es demasiado grande y no permite una apertura total (por la forma curva del techo), bien pudo ser un techo panorámico.
Los materiales interiores son agradables al tacto, el tablero cuenta con detalles de insertos con apariencia de fibra de carbón y terminaciones de aluminio, el volante forrado en cuero bien podría tener un mejor agarre ya que es muy delgado, pero eso es cuestión de gustos.
