La Tomografía Computarizada: 50 años cambiando el desarrollo de la Medicina
Por: Dr. Mario Osorio Valero, Jefe del área de TC del Centro Médico Nacional “20 de Noviembre” del ISSSTE.
LaSalud.mx.- La tomografía computarizada (TC) se considera una de las más importantes invenciones en el área de la medicina del siglo XX, siendo sin duda, el más importante suceso ocurrido en el ámbito del radiodiagnóstico, después del descubrimiento de los rayos X en 1895. La TC es la primera técnica de imagen donde se logran aplicar los procedimientos digitales desde el primer equipo fabricado.
Desde que el matemático austriaco J. Radón, quien demostró en 1917 que era posible reconstruir una imagen de un objeto de dos o tres dimensiones a partir de un gran número de sus proyecciones, pasando por Allan McLeod Cormack, quien en 1963 demostró que era posible lograr una imagen tomográfica resolviendo múltiples ecuaciones matemáticas, hasta Godfrey Newbold Hounsfield quien logró crear el primer prototipo de tomógrafo; se pone de manifiesto la necesaria vinculación del desarrollo científico técnico en todas las ramas de la ciencia y la innovación tecnológica para posibilitar la creación de la tomografía computarizada con su incuestionable eficacia diagnóstica. Tanto Cormack como Hounsfield recibieron el Premio Nobel de Fisiología y Medicina en 1979. Siendo un hecho trascendental, pues fue la primera vez que se otorgó un Premio Nobel de Medicina a dos científicos no médicos.
La historia de la tomografía computarizada da sus primeros pasos en octubre de 1971, año en el que se realizó la primera TC en una paciente de 41 años con sospecha de tumor en el lóbulo frontal, utilizándose un aparato prototipo en el Hospital Atkinson Morleyde Londres; el EMI Mark I, construido por Godfrey Hounsfield y su equipo en los laboratorios centrales de investigación de la compañía EMI (Electrical Music Industries, Ltd), al este de Londres.
Con este estudio se confirmó el diagnóstico de la paciente, la cual fue operada de manera exitosa y de acuerdo a las palabras del cirujano “el tumor se veía exactamente como en la imagen”. Aquí empezó el aporte de la revolución tecnológica en la salud de la humanidad.
El primer tomógrafo comercial fue introducido en 1973, utilizaba un haz lineal con un solo detector y un mecanismo de traslación/rotación, tenía una matriz de 80 x 80 -actualmente se trabaja con matrices de 160 x 160 hasta 512 x 512 con una resolución espacial de 0.5 cm- y requería el empleo de una bolsa de agua para estabilizar y normalizar la imagen. Cada imagen necesitaba de 4.5 minutos para ser obtenida y 20 minutos más para reconstruirse, por lo que inicialmente se utilizaba solamente para visualizar partes no móviles del cuerpo como el cráneo.
Durante la siguiente década y media se realizaron mejoras técnicas importantes que dieron como resultado disminuir el tiempo de adquisición lo que permitió explorar todo el cuerpo, además del cráneo. Esta evolución abrió la posibilidad de obtener imágenes de todo el cuerpo y permitir el diagnóstico de lesiones no solo del sistema nervioso central, sino también del resto de los órganos enfermos.
La tomografía computarizada ha avanzado en los últimos años hacia la obtención de imágenes volumétricas de un sector determinado del cuerpo, las que se adquieren mientras se desliza la mesa donde se encuentra el paciente, esto se debe principalmente al aumento de detectores, con lo que logran varios “cortes” en un solo barrido helicoidal y aumentar así la resolución espacial.
En 1989, surge la Tomografía Computarizada Helicoidal, la cual tenía ventajas considerables a su antecesora, la Tomografía Axial Computada (TAC). Ya que permitía la adquisición continua de varias imágenes por cada inspiración; esto era posible debido a la sincronía que se daba entre el tubo de rayos X, la camilla y los detectores (una sola fila de detectores).
En el año 1998, nace la Tomografía Computada Multidetector, también conocida como Multislice (TCMS), esta técnica contaba con 4 filas de detectores los cuales fueron en aumento conforme se perfeccionaba el diseño y técnica del instrumento hasta llegar actualmente a encontrar tomógrafos con 512 filas de detectores, es importante resaltar que a mayor número de filas de detectores los resultados son mejores. En el caso de los tomógrafos de 512 filas de detectores se cuenta con la tecnología Smart Cardiac, para exploración cardiaca con imágenes de arterias coronarias sin movimiento y a cualquier frecuencia cardiaca. Su tecnología Inteligente Smart Dose reduce la exposición a la radiación hasta un 82%; por otro lado, la tecnología Smart Stroke permite tomar decisiones críticas sobre el estado de pacientes con perfusión cerebral y protocolos multifase.
Los avances tecnológicos hacen posible la aplicación de este método de imagen en diferentes áreas de la medicina con sus respectivos beneficios, permitiendo realizar diagnósticos, que hasta hace 50 años, eran imposibles, ejemplo de ello es en el área pediátrica, donde podemos realizar estudios sin sedación con exploración completa de tórax y abdomen en menos de un segundo.
El continuo desarrollo de la tomografía computarizada ha modificado en el devenir del tiempo muchas actividades relacionadas con la salud, debido al impresionante desarrollo de la tecnología. En la actualidad son escasas las acciones médicas que no incluyan la aplicación de este método de diagnóstico por imagen, el cual es producto de un desarrollo impetuoso de la ciencia y la tecnología que modifican el modo de concebir el conocimiento y su aplicación en las actividades médicas y los servicios de salud a nivel mundial.
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