Un hombre y una mujer están cenando en un elegante restaurante, y el marido se la pasa observando a una señora borracha, bebiendo una copa, sentada sola en una mesa cercana, y con una gran sonrisa en la cara.
Su esposa le pregunta: “¿La conoces?”
“Si”, suspira el marido, “Ella es mi ex-novia. Me dijeron que ella comenzó a beber inmediatamente después de que rompimos y nos separamos hace siete años, y desde entonces no ha estado sobria ni un día”.
“¡Mi Dios!”, dice su mujer, “¿Quien pudiera pensar que una persona podría celebrar tanto tiempo?”.
