- Iniciativa busca proteger a grupos vulnerables en una región de alto tránsito migratorio
LaSalud.mx .- México y Estados Unidos han lanzado una histórica Jornada de Vacunación en la Garita de Otay, enfocada en la inmunización contra la influenza, COVID-19 y neumococo para niñas, niños y personas mayores de 60 años. Esta iniciativa conjunta busca garantizar el acceso oportuno a la vacunación en una de las zonas con mayor tránsito migratorio a nivel mundial.
Objetivos de la campaña
La estrategia tiene como objetivo prevenir enfermedades respiratorias y asegurar el acceso equitativo a las vacunas, protegiendo así a los grupos vulnerables en esta región de alta relevancia cultural y migratoria. Durante el evento, el director general del Centro Nacional para la Salud de la Infancia y la Adolescencia (Censia), Daniel Aceves Villagrán, destacó la importancia de la vacunación como una estrategia clave en la salud pública.
Impacto económico y sanitario
Aceves Villagrán subrayó que por cada dólar invertido en vacunas se generan 26 dólares de retorno y que, a nivel global, se evitan aproximadamente 3.5 millones de defunciones anualmente gracias a la vacunación. Resaltó que esta jornada permite la articulación de esfuerzos más allá de las fronteras, en áreas con alta densidad poblacional.
Actividades de vacunación
La jornada de vacunación se llevó a cabo en los nueve cruces fronterizos entre Baja California y Estados Unidos, beneficiando a las personas en tránsito. Hasta la semana 13 de la Campaña de Vacunación de la Temporada Invernal 2024-2025, se han aplicado en Baja California 139,821 dosis contra COVID-19 y 585,818 dosis contra la influenza estacional.
Presencia de autoridades
En la ceremonia, estuvo presente el subsecretario de Salud del estado de Baja California, Néstor Saúl Hernández Mira, quien destacó los avances en materia de salud instruidos por el secretario de Salud, David Kershenobich. También asistió el representante de la OPS/OMS, Adriano Tavares, quien manifestó que este tipo de actividades contribuyen a la reducción de fallecimientos en la región de Norteamérica.
Por parte del condado de San Diego, asistieron Elizabeth Hernández, directora de Servicios de Salud Pública, y Alicia Espinoza, jefa de Salud Fronteriza, entre otros funcionarios.
