
- Investigadores de la UNAM implementan sistemas silvopastoriles en Veracruz para restaurar suelos y mejorar la producción
MundoDeHoy.com .- En un esfuerzo por transformar la ganadería tradicional en una práctica más sostenible, un equipo de investigadores del Instituto de Ecología (IE) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha implementado un innovador proyecto en Los Tuxtlas, Veracruz. Este proyecto, que abarca 25 hectáreas de sistemas silvopastoriles intensivos y la restauración de 19 hectáreas de tierras anteriormente dedicadas a la ganadería convencional, busca no solo mejorar la producción agrícola, sino también restablecer la salud del suelo y potenciar los recursos para las comunidades locales.

Karina Boege Paré, investigadora del IE y coordinadora del proyecto, explicó en una entrevista que el objetivo principal es atraer múltiples beneficios a las comunidades que dependen de la ganadería. “Nuestro trabajo no solo se centra en la producción, sino también en la obtención de información relevante que facilite la transición hacia prácticas más sostenibles”, afirmó Boege Paré.
El éxito del proyecto radica en un enfoque colaborativo que involucra a productores locales, asociaciones civiles y funcionarios de los gobiernos municipal, estatal y federal. “Hemos logrado consolidar una Red de Ganadería Sostenible, construida sobre la confianza y el trabajo conjunto”, comentó la experta.
Para fomentar el aprendizaje social y el intercambio de experiencias, se establecieron cuatro ranchos demostrativos. En estos espacios, se implementaron los sistemas silvopastoriles, que combinan la cría de ganado con la plantación de árboles y arbustos. Estas prácticas no solo mejoran la calidad del forraje, sino que también contribuyen al bienestar animal al proporcionar sombra y reducir la deshidratación.
Retos de la Ganadería Convencional
Boege Paré destacó los problemas asociados con la ganadería convencional, que tiende a empobrecer los suelos y agotar las fuentes de agua, resultando en una baja productividad. “Los productores a menudo dependen de insumos externos como herbicidas y fertilizantes, lo que incrementa sus costos y afecta la salud del ecosistema”, explicó.
La implementación de sistemas silvopastoriles permite mantener el mismo número de vacas en menos hectáreas, gracias a la calidad superior del forraje. Esto libera áreas no aptas para la ganadería y contribuye a la restauración gradual de las fuentes de agua.

El equipo de investigación, que incluye biólogos, veterinarios, geólogos, ecólogos y antropólogos, ha realizado análisis bromatológicos para evaluar la calidad del forraje y el impacto de las emisiones de gases de efecto invernadero en los potreros. Además, se ha monitoreado la biodiversidad de escarabajos estercoleros, aves, mariposas y polillas, todos vitales para el reciclaje de nutrientes y la polinización.
La información obtenida se comparte en tiempo real con los productores, haciendo accesibles los beneficios ambientales y económicos de esta transición hacia una ganadería sostenible. “Es crucial que los productores entiendan cómo estas prácticas no solo benefician al medio ambiente, sino que también mejoran su rentabilidad”, enfatizó Boege Paré.
Un Futuro Sostenible
La investigadora subrayó la importancia de los enfoques colaborativos y transdisciplinarios para abordar los problemas socioambientales en México. “La ciencia debe estar al servicio de la comunidad para generar soluciones efectivas”, concluyó.
Este proyecto en Los Tuxtlas representa un paso significativo hacia una ganadería más sostenible, que no solo beneficia a los productores, sino también al medio ambiente y a las futuras generaciones.